La comunidad de los Osos es una sub cultura del la comunidad gay. Los Osos son usualmente hombres homo o bisexuales con cuerpos velludos y pelo facial; algunos son generosos de carnes, pero ello no es imprescindible. Los Osos usualmente dan mucha importancia al llevar una apariencia super masculina y evitan interactuar con hombres afeminados en sus gestos o posturas. Hay un gran debate en la comunidad gay sobre lo que realmente es un Oso: unos dicen qu
e es alguien que simplemente tenga la convicción de sientirse Oso; mientras otros aseguran que los Osos deben tener ciertas características físicas, como por ejemplo, pelo en pecho y un modo particular de vestir y comportarse. Dentro del grupo general de Osos también hay distinciones debido a la talla, contextura o edad; así tenemos a los Oseznos (cachorros), Nutrias y Lobos.
Como grupo más bien homogéneo, los Osos organizan reuniones y fiestas una o más veces al año en la que abunda la camaradería y la diversión sin límites. Ellos poseen, también, ropa y merchandising que los identifica y les recuerda el orgullo de sentirse los “más masculinos” de la comunidad homosexual. Acordes con las tendencias contemporáneas de la moda, los Osos usualmente se tatúan o llevan aretes o piercing en las tetillas, pene o testículos, detalles que los hacen aún más llamativos dentro de la sociedad gay.
De toda la gama de colores, sabores y texturas que existe para elegir en el universo gay, yo prefiero a los osos; nada más excitante que un hombre velludo (con barba o sin ella) para poner al rojo vivo la más nívea de mis sábanas. Nada más alucinante que internarse sin mapa ni brújula en lo más espeso de un torso afelpado y conquistar tramo a tramo ese vetado territorio reservado para pocos.
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