Matrimonio gay: la facultad de Psicología platense se expidió a favor de la iniciativa

08-07-2010 / Postura unánime de los consejeros directivos. Lo hicieron por un pedido de la CHA

Los 16 miembros del Consejo Directivo se pronuncian a favor de matrimonio homosexual. Hubo votación unánime

“En las antigua Grecia y Roma, la homosexualidad masculina era considerada la forma más sublime del amor. Luego, se definió a la relación amorosa entre hombres como aquello que servía al desarrollo de la sociedad, y la relación heterosexual, el amor por una mujer, llevaba al hombre a la reclusión familiar, por lo tanto a debilitar el valor del lazo social”. Apenas un vistazo a la historia antigua, “cunas de nuestras culturas”, sirvió como fundamento básico para que los miembros del Consejo Directivo de la facultad de Psicología de la UNLP adhieran ayer, por unanimidad, al proyecto de ley que propicia el matrimonio entre personas del mismo sexo; a contramano de lo votado el martes por congresales de la Comisión de Legislación del Senado.

La Comunidad Homosexual Argentina (CHA) había solicitado a la facultad que haga expresa su adhesión al proyecto de ley de aplicación igualitaria del matrimonio civil, cuya batalla culminará el 14 de julio, cuando lo debata el Senado Nacional.

Antes de que se exprese el cuerpo, la decana de Psicología, Edith Pérez, señaló: “Mi opinión personal es favorable (a ley del matrimonio entre personas del mismo sexo). Los derechos de las minorías deben ser respetados; tienen los mismos derechos que los heterosexuales”, indicó.

Además, la decana apuntó a quienes no comulgan con la idea: “Los que se han movilizado en contra son los mismos que se opusieron en su momento a la ley del divorcio. Por entonces hablaban sobre lo que les podría pasar a los hijos de padres divorciados y ahora hablan de lo que les podría pasar a los hijos de los homosexuales. Los hijos de los divorciados –continuó– no presentan problemas muy distintos a los hijos de quienes no se separaron”. En ese sentido, Pérez aclaró que “la Psicología no hace futurología, y no sabemos lo que va a pasar con los hijos de las parejas homosexuales, pero no podemos adelantarnos de manera prejuiciosa”.

En tanto, consejeros representantes de todos los claustros (estudiantes, graduados, docentes) hicieron alusión a la igualdad de derechos: “La protección legal no puede ser negada a nadie. La condición sexual no puede condicionar el ejercicio de los derechos. La Constitución consagra que todos somos iguales ante la ley, de modo que el Estado no debe discriminar”, argumentaron.

Al mismo tiempo, subrayaron “la importancia de que los debates de la sociedad se trasladen al seno de la Universidad, y de la facultad en particular”.

El Consejo Directivo resolvió, también por unanimidad, la elaboración de una declaración –más allá de la adhesión expresa a la ley– en la que se argumenten sus posturas a favor de la legislación para hacerla llegar a los senadores de la Nación. Además, asumieron el compromiso de encarar una investigación conjunta para evitar que “muchos usen sus saberes para discriminar”, y la realización de una jornada pública para que participe la comunidad.

ADOPCIÓN. No pocos consejeros refirieron ayer al “prejuicio que esconden” algunos sectores –principalmente de la Iglesia– respecto de la adopción de hijos por parte de parejas homosexuales. Entre los argumentos, los psicólogos reunidos en el primer piso de la facultad rebatieron: “La procreación, que para algunos creyentes debe ser la referencia de la normalidad, la propia ciencia actual la ha dejado desprendida del mismo coito sexual, no sólo para parejas homo sino también para parejas hétero”.

El especialista y consejero Jorge Zanghellini, autor de la fundamentación que representó el claustro de profesores, señaló: “Las cuestiones amorosas son de índole de elección subjetiva. Las cuestiones diferenciales tienen que ver con su lugar en la sociedad, con su rechazo y aceptación en las familias de origen, en los lazos sociales de trabajo y amistad y en los proyectos de producción mater-paterno-filial.

En estas cuestiones diferenciales –continuó el especialista–, una legislación que autorice el matrimonio gay ayuda, sin duda, a su localización y aceptación en el mundo sociocultural. Esta dirección tiene la posibilidad de la aceptación de las particularidades subjetivas y no de la anulación de las diferencias”, señaló.

“El amor es una relación entre dos sujetos, donde ambos se eligen mutuamente. Y esa elección del otro tiene, en cada uno, una causación en su forma de constitución subjetiva. Cuando se ama, no es asunto de sexo”, agregó el psicólogo.

Hacia el final de su exposición, Zanghellini habló en primera persona: “Y si para uno (en referencia a él mismo) el otro del amor no puede tener más que los brillos de una mirada y las sinuosidades y enigmas de una mujer que causa, para alguien diferente en su historia de vida esos rasgos del otro tienen diferentes signos que lo causan y enamoran. Ambos deben estar dentro de la ley humana”.

EN EL NOMBRE DE DIOS. “No es casual que aquéllos que se oponen a las respectivas leyes se sostengan en el nombre de Dios”, señaló Zanghellini, en un párrafo dedicado a quienes invocan a Dios y a la Iglesia para sustentar sus negativas a aceptar la ley de matrimonio homosexual. “Decir que es el mismo Dios el que no quiere la homosexualidad sería sostener que Dios crea lo que no quiere, sería adjudicarle una impotencia a ese Dios respecto de lo creado. Y eso sería concluir que Dios está fallado… lo que para el creyente sería poco consistente”, concluyó.


Fuente:EL ARGENTINO.COM